domingo, 22 de octubre de 2017

GRADUACIÓN PARA VIDA ETERNA 4

Siempre aprendiendo y nunca pueden llegar al conocimiento de la verdad. (2 Timoteo 3:7)

Cuando finalmente llegamos al punto donde creemos que estamos preparados para los cursos de postgrado en el Nivel Tres del Plan de Estudios de la Vida Eterna del Padre Celestial que nos habrán gastado muchas túnicas poniendo y quitando continuamente. Nosotros podemos haber incluso gritó en nuestras mentes para ayuda en romper el círculo vicioso que parece sobre lo cual estábamos pisando. Con toda probabilidad no hemos entrado en el Plan de Estudios de postgrado de Nivel Tres porque tenemos una idea equivocada o de hecho ninguna idea cuál es ese plan de estudios.

Como muchos de los avances realmente importantes que hacemos en la vida, el Plan de Estudios del Nivel Tres – recibiendo los atributos del Celestialidad o llegando a ser como el Padre Celestial a través de su Gracia parece que vienen a nosotros como un regalo una vez el Maestro ha visto nuestra voluntad a someterse a las condiciones que hemos aprendido mientras que luchaba en las aulas de Nivel Uno y Nivel Dos.

Algunas de Sus palabras revelados podrían ayudarnos a entender mejor qué Nivel Tres es:

Porque nosotros trabajamos diligentemente para escribir, a fin de persuadir a nuestros hijos, así como a nuestros hermanos, a creer en Cristo y a reconciliarse con Dios; pues sabemos que es por la gracia por la que nos salvamos, después de hacer cuanto podamos; y a pesar de que creemos en Cristo, observamos la ley de Moisés, y esperamos anhelosamente y con firmeza en Cristo, hasta que la ley sea cumplida.

Pues para este fin se dio la ley; por tanto, para nosotros la ley ha muerto, y somos vivificados en Cristo a causa de nuestra fe; guardamos, empero, la ley, a causa de los mandamientos.

Y hablamos de Cristo, nos regocijamos en Cristo, predicamos de Cristo, profetizamos de Cristo y escribimos según nuestras profecías, para que nuestros hijos sepan a qué fuente han de acudir para la remisión de sus pecados.

Por lo tanto, hablamos concerniente a la ley para que nuestros hijos sepan que la ley ya no rige; y, entendiendo que la ley ya no rige, miren ellos adelante hacia aquella vida que está en Cristo, y sepan con qué fin fue dada la ley. Y para que, después de cumplirse la ley en Cristo, no endurezcan contra él sus corazones, cuando la ley tenga que ser abrogada.
(Libro de Mormón – 2 Nefi 25: 23-27)

Sí, venid a Cristo, y perfeccionaos en él, y absteneos de toda impiedad, y si os abstenéis de toda impiedad, y amáis a Dios con todo vuestro poder, mente y fuerza, entonces su gracia os es suficiente, para que por su gracia seáis perfectos en Cristo; y si por la gracia de Dios sois perfectos en Cristo, de ningún modo podréis negar el poder de Dios. Y además, si por la gracia de Dios sois perfectos en Cristo y no negáis su poder, entonces sois santificados en Cristo por la gracia de Dios, mediante el derramamiento de la sangre de Cristo, que está en el convenio del Padre para la remisión de vuestros pecados, a fin de que lleguéis a ser santos, sin mancha.
(Libro de Mormón, Moroni 10:32, 33)

Y oímos la voz decir: Escribid la visión, porque he aquí, este es el fin de la visión de los padecimientos de los impíos.

Y otra vez testificamos, porque vimos y oímos, y este es el testimonio del evangelio de Cristo concerniente a los que saldrán en la resurrección de los justos: Estos son los que recibieron el testimonio de Jesús, y creyeron en su nombre, y fueron bautizados según la manera de su sepultura, siendo sepultados en el agua en su nombre; y esto de acuerdo con el mandamiento que él ha dado, para que, guardando los mandamientos, fuesen lavados y limpiados de todos sus pecados, y recibiesen el Santo Espíritu por la imposición de las manos del que es ordenado y sellado para ejercer este poder;

Y son quienes vencen por la fe, y son sellados por el Santo Espíritu de la promesa, que el Padre derrama sobre todos los que son justos y fieles. (Doctrina y Convenios
76:49-53)

Probablemente sería apropiado añadir otra palabra de precaución. Son muchos los que podrían caer en la trampa de la mente de Telestialidad de pensar que porque hemos sido verdadero y fiel en nuestro aprendizaje y practicar los principios enseñados en las aulas de Nivel Uno y Dos nos estamos debidas recompensa por nuestra fidelidad. Si nos sucumben a esta herejía se anunció por las filosofías de los hombres, de hecho hemos fracasado en comprender el significado de la palabra Don y aún no han empezado a entender el principio de la Gracia.

Russell M. Nelson, Apóstol del Señor en una reciente Conferencia General de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días habló de un estudio que había hecho en las escrituras acerca de nuestro Señor y Salvador por buscar todas las referencias a Jesucristo encontrado en la guía de tópicos mientras oro mucho durante su estudio. Una actividad maravillosa para santificar y hacer el sábado una delicia sería hacer una búsqueda similar de los principios de Gracia y de Dones.

Espero que las bendiciones de los cielos nos derraméis con el deseo de ser diligentes en nuestro esfuerzo por arrojar de nuestra Telestialidad y nos arropa en Terrestrialidad y prepáratenos para amablemente y con gratitud recibir el Don de los atributos de Celestialidad o llegar a ser como el Padre Celestial a través de su Gracia.

Siempre aprendiendo y nunca pueden llegar al conocimiento de la verdad. (2 Timoteo 3:7)

PENSAMIENTOS PARA UN DÍA DE REPOSO – WILLIAM L. RILEY

EDITADO POR – KATHLEEN W. RILEY

No hay comentarios:

Publicar un comentario