domingo, 14 de marzo de 2010

TRABAJAR JUNTOS EN EL VALLE FELIZ

La semana pasada en mis Pensamientos para un Dia de Reposo, hice referencia a 'compartir de lo poco que recogemos con otros'. No paso mucho despues de enviar los correos electronicos con esta fase incluida, que me di cuenta que no todos han arado los mismos campos de la vida que yo. Ahora tratare de poner a todos en igualdad de condiciones y poner a todos en el mismo ambito de referencia.

En algun lugar de mi historia personal,el cual durantes los ultimos anos se ha convertido cada vez mas dificil de poner en cualquier orden cronologico, me presentaron un poema de Clarence Cook titulado "Abram y Zimri" que ahora les presentare o para que lo recuerden.

Abram y Zimri eran duenos de un terreno en compania
Un campo plano se escondia en un valle feliz
Ellos lo araban con un arado, y en la primavera
Sembraron, caminando lado a lado, la fecunda semilla.
En la cosecha, cuando la agradecida tierra sonrio con el grano,
Cada uno llevo a su casa la mitad de sus gavillas
Y las almacenaron con gran trabajo en sus graneros.
Ahora, Abram tenia una esposa y siete hijos.
Pero Zimri vivia en su casa.

Una noche antes que las gavillas fueran juntadas,
Mientras Zimri se tendia en su solitaria cama,
Y contaba en su mente sus pequenas ganancias,
Penso en la porcion de su hermano Abram,
Y dijo, " yo vivo solo en mi casa,
Pero Abram tiene una esposa y siete hijos,
Y aun asi compartimos las gavillas cosechadas por igual!
Me levantare y me cenire, e ire
Hasta el campo, y anadire de la mia a la suya."

Entonces se levanto y se cino sus lomos,
Y fue muy silenciosamente al campo plano,
La luna brillaba a traves de oscuras nubes,
Y los arboles se veian negros contra el frio cielo azul,
Las ramas ondeaban, y susurraban en el viento.
Entonces Zimri guiado por la cambiante luz,
Bajo por el sendero de la montana, y encontro el campo,
Tomo una generosa tercera parte de su almacen de gavillas,
Y con mucho gusto las puso con las otras de su hermano.
Y entonces regreso a dormir y a sus suenos felices.

Ahora la misma noche en que Abram estaba en su cama,
Pensando en su estado dichoso en la vida,
El penso en la porcion de su hermano Zimri,
Y dijo, " El vive en su casa solo,
El llega a su hogar en las noches a una casa fria
Y tiene unos pocos amigos sino yo y los mios."
Porque estos dos cultivan solos el valle feliz;

Mientras yo, a quien el cielo ha bendecido grandemente
Vivo feliz con mi esposa y siete hijos,
Quienes me ayudan en mi trabajo haciendolo mas lijero;
Y aun asi compartimos las gavillas cultivadas por igual,
Esto sin duda no agrada a Dios.
Me levantare, me cenire e ire
Al campo, y tomare de mi almacen,
Y anadire al monton de mi hermano Zimri."

Entonces se levanto y se cino sus lomos,
Y fue muy silenciosamente al campo plano,
La luna brillaba a traves de oscuras nubes,
Y los arboles se veian negros contra el frio cielo azul,
Las ramas ondeaban, y susurraban en el viento.
Entonces Abrami guiado por la cambiante luz,
Bajo por el sendero de la montana, y encontro el campo,
Tomo una generosa tercera parte de su almacen de gavillas,
Y con mucho gusto las puso con las otras de su hermano.
Y entonces regreso a dormir y a sus suenos felices

Entonces a la siguiente manana con la salida del sol
Los hermanos se levantaron, y salieron a su trabajo,
Y cuando llegaron a ver las pesadas gavillas,
Cada uno se maravillo en su corazon el encontrar que su monton,
Aunque habian dado una tercera parte de este, era el mismo aun.

Ahora la siguiente noche cuando Zimri fue al campo
Tomo de su almacen de gavillas una parte generosa
Y la puso en el monton de la de su hermano Abram,
Y se recosto destras de su monton a mirar.
La luna miraba desde encarceladas nubes plateadas,
Y los cetros se veian negros contra el cielo;
Las ramas de olivo susurraban en el viento.

Entonces Abram bajo silenciosamente de su casa,
Y mirando a la izquierda y a la derecha, siguio,
Tomo de su amplio almacen una tercera parte,
Y lo puso en el monton de su hermano Zimri.
Entonces Zimrio se levanto y lo apreto entre sus brazos,
Y lloro sobre su cuello, y beso sus mejillas;
Y Abram entendio todo, y no podia hablar;
Tampoco pudo Zimri, porque sus corazones estaban llenos.

Cuando lei este poema por primera vez, muy poco sospeche del continuo impacto que tendria en mi el resto de mi vida. Con frecuencia siento que mi corazon pasa un latido y se llena de calidez mientras una escena a otra me recuerdan a los dos hermanos llorando sobre el cuello de cada uno. Me gustaria compartir unos cuantos eventos recientes que brillaron como plateadas nubes y me llevaron una vez mas a ese valle feliz donde Abram y Zimri sembraron lado a lado en su campo plano.

Veo un jovencito de 10 anos pararse de su silla y yendo al frente de la capilla ayuda a su hermanito quien esta tieniendo problemas recordando que era lo que queria decir.

Veo una mujer llena de gracia parada en frente de las mesas llenas de libros, preguntandose que nino o que adulto disfrutara de la lectura de este o ese libro, mientras se aguanta la tentacion de ponerlos en su propio monton de libros.

Veo una unidad militar dedicando sus hora libres en un esfuerzo por llenar el hueco de animosidad entre inquilinos y residentes, al anadir montones generosos, a las vidas de los 'enemigos' en un intento por hacer de su vida destrozada por la guerra un poco mas comoda.

Veo una madre sacrificando sus necesidades basicas por la felicidad y la comodidad de sus hijos.

Veo una maestra prendiendo velas en la plateada noche para que asi una luz mas brillante brille en sus estudiantes mientras que con satisfaccion permanece en la sombra todo el tiempo.

Veo a un doctor llevar sus habilidades a una tierra extrana para derramar ayuda, comididad y curacion a aquellos que para siempre jamas dejaran de ser extranos, pero que estaran tan llenos que no podran hablar.

Veo a un abogado quien su propio granero nunca parece estar lleno, porque ella se niega a pedir pagos por sus servicios a aquellos que percibe que tienen problemas en la vida mas grandes que los suyos propios.

Veo a un plomero que mantiene su viejo camion cojeando, pero es siempre el primero en contestar la llamada de una viuda a la que algo en su casa gotea o a parado de funcionar, sin ningun pensamiento de alguna vez ser recompensado.

Veo una jovencita caminado el sendero que es apenas visible, a fin de asegurarse que la nueva jovencita en la clase tenga por lo menos una amiga.

Una y otra vez en mis caminatas diarias veo gente que toma de lo poco que recogen de sus gavillas una tercera parte, y la anaden al monton de su vecino. Hay veces en que siento que he sido atrapado en sus brazos y desearia besar sus cuellos y no poder hablar. Estoy verdaderamente agradecido por los constantes recordatorios del valle feliz en el que vivo.

2 comentarios:

  1. Querido Hermano Riley: Gracias por hacernos participes de los "Pensamientos para el Dia de Reposo" Son muy edificantes y disfrutamos mucho su lectura y los meditamos en nuestra mente y en nuestro corazon cada semana. Ademas es un bello gesto el hecho de poner las traducciones en español que nos ayudan a tener un mejor entendimiento. Le amamos mucho al igual que a la hermana Riley. Ya casi terminamos la mision de 18 meses y estaremos listos para regresar a los Estados Unidos, para reunirnos con los hijos , los nietos y amigos.
    Con amor

    Graciela y Armando.

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  2. En verdad me ha llenado de una nueva visión y un sentimiento muy dulce, esta verdad que se vive día a día, quizá no en todo momento, pero sí en el trascurrir de la vida con los seres que queremos y nos rodean.
    Gracias por compartir este poema.
    Esther Morino

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