domingo, 19 de agosto de 2018

DANDO TESTIMONIO

Aunque pienso acerca de mis Pensamientos y hago algunas consideraciones preliminares sobre lo que voy a escribir durante la semana, suelo escribir los miércoles por la mañana. El miércoles, cuando este Pensamiento iba a ser escrito tuve una experiencia muy diferente. Me desperté alrededor de las 3 de la mañana y antes de poder volver a dormir mi cerebro se transformaba en el Pensamiento que estaría escribiendo hoy. A las 3:30 AM me rendí en volver a dormir, así que fui a la computadora para escribir lo que estaba sucediendo en mi mente.

Después de pocos minutos, mientras revisaba el cuarto capítulo de Segundo Nefi, me di cuenta de que mi cerebro había puesto en me mente algunas palabras de Alma en el Salmo de Nefi, que es una de las maneras en que se hace referencia a este capítulo de Segundo Nefi. Ahora que he revelado la fragilidad del instrumento que intenta organizar y escribir estos Pensamientos Para un Día de Reposo, entendería si mis lectores disminuyen.

Una vez tuve mis pensamientos viajando por el camino correcto y después de refrescarme en lo que estaba contenido en el Salmo de Nefi y fui una vez más capaz de ganar lo que voy a llamar libremente el control de mi mente. Me impresionó la noción de que, aunque Nefi estaba tratando de someter la ira de sus hermanos hacia él poco después de la muerte de su padre Lehi, lo estaba dando un testimonio poderoso y fuerte.

A lo largo de los años, como he estudiado y escuchado lo que se ha enseñado acerca de dar testimonios, he llegado a creer en varios principios acerca de los testimonios que tenemos y compartimos con otros. Mientras buscas el Salmo de Nefi podrás fácilmente encajar sus palabras en una o más de estas categorías:

Cuando damos nuestro testimonio de los principios del Evangelio, nuestro testimonio será más poderoso si somos específicos en lugar de generales en
las áreas sobre las que estamos testificando.

Al expresar los desafíos que enfrentamos en la vida a otros, sería prudente utilizar las generalidades en lugar de las específicas.

Dado que nuestro conocimiento y comprensión están constantemente en un estado de flujo, nuestros testimonios deben reflejar ese cambio.

Debemos tener cuidado de no engañarnos para que pensemos que hemos alcanzado nuestra capacidad de conocer las verdades del Plan del Padre Celestial.

Hay algunos acontecimientos espirituales en nuestras vidas que pueden caer en la categoría de ser tan sagrado que deben permanecer en nuestros corazones.

Es necesario ajustar los testimonios para que sea apropiado para la ocasión y para el público al que testificamos.

Debemos renunciar a nuestros puntos de vista personales acerca de llevar testimonio en la reunión sacramental al consejo de los Apóstoles y Profetas vivos.

Debemos estar dispuestos a someternos a las exhortaciones del Espíritu Santo cuando nos pidan que llevemos nuestro testimonio.
El rodamiento del testimonio de uno nunca debe convertirse en un medio para satisfacer las necesidades personales o buscar el honor o la admiración de los demás

Sería prudente reconocer en nuestras mentes y cuando sea apropiado como parte de nuestros testimonios nuestro reconocimiento de nuestro minúsculo entendimiento en comparación con el de la Deidad

Cuando el público de nuestro testimonio se limita a comunicarse con nuestro Padre Celestial no nos debe sorprender si nos encontramos expresando gratitud y suplicando fuerza para superar nuestras debilidades

Una de las indicaciones de que algo ha muerto es que ha dejado de crecer, por lo tanto, sería prudente seguir nutriendo nuestros testimonios de árboles jóvenes para que continúen creciendo


Aunque yo no lo sabía en ese momento, en la primavera de 2010 yo estaba enseñando lo que sería mi último grupo de estudiantes en un ambiente de aula formal. (Me gusta pensar en mi escritura en esta última fase de mi vida como una situación de maestre informal.) De todos modos, uno de los miembros de la clase, mi amigo, Paul Hansen, había estado trabajando en un proyecto que condujo a la producción de una réplica de las placas de oro del Libro de Mormón. Como parte de su proyecto de desarrollo que había comprado un dispositivo que se imprime en las placas de metal como se indica en un programa de computador. Como un regalo para mí, se ofreció a imprimir mi testimonio en una placa metálica que estaba preparada para asemejarse a una placa de oro como las utilizadas por Mormón y Moroni, ya que fueron escribiendo la historia de los descendientes de Lehi en las Américas.

Como estaba escribiendo este pensamiento me tomó un momento para revisar lo que había escrito y lo que había sido grabado en ese plato. Rápidamente realicé dos cosas muy interesantes mientras leía; En primer lugar, que durante los últimos ocho años he tenido muchos cambios y espero haber tomado pasos progresivos en el contenido de mi testimonio. En segundo lugar, que aunque hay permanencia a lo que se grabó en ese plato, de ninguna manera es representativo de mis creencias cada vez más progresistas.

Al terminar de escribir este pensamiento, mi oración es que usted podría estar motivado a pasar su día de reposo reflexionando haciendo una revisión en del Salmo de Nefi del cuarto capítulo de Segundo Nefi y tal vez incluso la grabación con la palabra escrita algunos de sus propios testimonios.


PENSAMIENTOS PARA UN DIA DE REPOSO – WILLIAM L. RILEY

EDITADO POR – KATHLEEN W. RILEY

No hay comentarios:

Publicar un comentario