domingo, 13 de noviembre de 2011

PERSEVERAR HASTA EL FIN

Cuando era joven solía pasar horas construyendo estructuras con un juego de troncos de madera y con pequeños bloques de color rojo. Los troncos estaban hechos de madera real y servían maravillosamente, hasta que entraban en contacto con la humedad. Puesto que se trata también de los días antes que existieran los Legos de plástico, estos bloques rojos pequeños también estaban propensos a danarse por causa de la humedad. Una de las cosas maravillosas de estas primeras epocas era que las partes no venían pre-empacadas con instrucciones para crear un solo objeto. Lo única que limitaba lo que iba a construir era mi imaginación y el número de troncos o bloques que tenía en mi baúl.

Después de haber dedicado muchas horas construyendo un complejo pionero o una torre futurista, a los pocos minutos mis creaciones eran demolidas y regresaba los troncos y los pequeños bloques rojos de nuevo al baúl.

No consideraríamos el haber tenido una vida increíble, si las estructuras de los troncos y de los pequeños ladrillos rojos hubieran sido las única parte de nuestra vida que hubiesen sido construidas durante un largo tiempo, y que luego hubiesen sido destruidas en sólo cuestión de segundos?

¿Con qué frecuencia vemos a alguien de buena reputación desmoronarse por causa de una desacertada elección?

¿Con qué frecuencia vemos un patrón de honestidad destruirse por una deshonesta "oportunidad única en la vida"?

¿Con qué frecuencia vemos cuerpos bien tonificados debilitarse rápidamente al descuidar la dieta, el ejercicio o la enfermedad?

¿Con qué frecuencia vemos años de ahorro erradicarse al derrochar el presupuesto comprando de todo?

¿Con qué frecuencia vemos una vida entera de unidad escabullirse porque alguien sucumbió al llamado de una sirena?

¿Con qué frecuencia vemos un talento extinguirse al dejar de practicar?

¿Con qué frecuencia vemos el aprendizaje limitarse al no continuar los ejercicios de retención?

¿Con qué frecuencia vemos la creencia en la Deidad disolverse debido a que dejamos de orar y de asistir a la capilla?

Observar la repetición de estos pasajes en nuestra vida personal y la vida de los seres queridos nunca parece disminuir la tristeza que acompaña la demolición de una aptitud o de la adquisición de un atributo que se había construido a través de anos colocando correctamente un ladrillo sobre otro.

Simplemente porque hay una frecuencia al esforzarnos por eliminar estas actividades, no quiere decir que este es la forma en que deben ser las cosas. Todos debemos creer firmemente en el principio maravilloso del arrepentimiento y, quizás, hemos tenido numerosas ocasiones en que hemos pedido misericordia. Sin embargo, podría estar bien el dar la misma atención al principio de perseverar hasta el fin.

Durante mis años de más experiencia (eufemismo para la tercera edad) junte pueblitos de navidad alrededor de la casa y sólo los quite después de las numerosas solicitudes o suplicas por poner nuestra casa como estaba antes de la navidad. Creo que si hubiera habido espacio disponible, un año Feng Shui hubiera sido parte de mi entorno. Aunque esta actividad de ninguna manera 'persevero hasta el fin', no obstante, tuve la oportunidad de adquirir un poco de entendimiento entre el placer y la emoción que proviene al construir con bloques pequeños de color rojo o los troncos de madera, su inmediata destrucción, y la alegría y la satisfacción continua que viene cuando los resultados de nuestros esfuerzos perseveran, aunque sólo sea por una temporada.

Podríamos considerar esforzarnos más por mantener nuestra reputación completa a través de tomar decisiones correctas.

Podríamos considerar siempre hacer de la honestidad la mejor política.

Podríamos considerar ser constantes con los hábitos saludables.

Podríamos considerar concentrarnos en las necesidades y controlar los deseos.

Podríamos considerar las relaciones fieles más importantes que las fantasías.

Podríamos considerar los eternos talentos y no los temporales.

Podríamos considerar la capacidad de aprender como una bendición eterna.

Podríamos considerar la construcción de relaciones Celestiales como una responsabilidad diaria.

Sí, el arrepentimiento es de enorme importancia, un principio necesario y bien utilizado, pero el principio de perseverar fielmente hasta el fin es digno de consideración debido a la constancia del gozo, la paz y la satisfacción que seguramente van a llegar.

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